La falta de profesionales amenaza con cerrar los servicios sociales en Cádiz. Existe una situación de bloqueo en la Delegación de Personal y la Secretaría General debido a una disparidad de criterios e interpretaciones que afecta tanto a la contratación de personal como a la incentivación de los pocos funcionarios que realizan el trabajo.
La FeSP-UGT ha denunciado en diversas ocasiones la falta de personal, señalando que no se cubren vacantes presupuestadas, sustituciones por enfermedad ni se respetan las figuras legales establecidas para la modalidad de contratos interinos. Esta situación ha llevado al cierre de ventanillas municipales, instalaciones deportivas, bibliotecas y ahora amenaza con afectar a los servicios sociales.
Actualmente, la Delegación soporta la ausencia de 13 puestos de técnicos entre trabajadoras sociales y psicólogas, y más de 7 puestos administrativos, incluyendo 4 auxiliares administrativos y 3 administrativos. Existen bolsas constituidas legalmente para cubrir estas plazas desde 2021, pero el problema radica en que el Ayuntamiento de Cádiz ha pasado de la temporalidad a la precariedad laboral tras la aprobación de la ley 20/21.
La figura del interino, recogida en el TREBEP, se ha convertido en "misión imposible" según la FeSP-UGT, y se ha optado por usar figuras como "la acumulación de tareas" para cubrir trabajos estructurales, lo que constituye una ilegalidad. No se tramitan vacantes de diversas categorías como electricistas, técnicos y administrativos, y tampoco se cubren bajas, según criterios técnicos que la FeSP-UGT considera absurdos. La FeSP-UGT destaca que “nos parece absurdo tener que recordar que la figura del interino está recogida en la ley para estos supuestos, y que 'el miedo o la cautela' que alegan determinados técnicos a que se eternicen estos nombramientos, no debe paralizar la actividad municipal; y mucho menos dejar de contratar".
El alcalde de Cádiz, principal responsable de esta situación, no ha actuado con diligencia. La FeSP-UGT insta al alcalde a tomar cartas en el asunto, ya que la falta de acción está paralizando la actividad municipal y privando a la ciudadanía de unos servicios de calidad. Las vacantes de trabajadoras sociales y psicólogas en los servicios sociales, que podrían haberse cubierto desde febrero, han sido rechazadas, y tampoco se sustituye la liberación sindical de una delegada de esta categoría desde hace casi un año. Según la FeSP-UGT, “tampoco se sustituye la liberación sindical de una delegada que pertenece a esta categoría, desde hace casi un año, no sabemos si con ínfulas de bloquear la actividad sindical".
A partir de agosto, los puestos de los ERACIS, programa andaluz para atender las zonas desfavorecidas, también quedarán sin cubrir, afectando tanto a trabajadoras sociales como a psicólogas. En total, son 20 puestos de trabajo que deberían estar a pleno rendimiento para atender a la población más vulnerable. Actualmente, las citas para atención primaria se están dando para octubre, lo que afecta a servicios esenciales como desahucios y cortes de luz y agua. La FeSP-UGT advierte que “con este problema que venimos denunciando nos tememos que 'las colas del hambre vuelvan', atentando contra la dignidad de la gente y de los servicios públicos".
La FeSP-UGT insta al alcalde a resolver cuanto antes esta situación y a imponer el sentido común para evitar que la empleabilidad quede a merced de interpretaciones que bloquean la actividad municipal. La FeSP-UGT concluye que “si quiere de verdad ser el alcalde más social empiece por la plantilla municipal".
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