Le costó salir del escenario a un emocionado Alejandro Sanz. Le costó despedirse de Cádiz a su Hijo Adoptivo después de cubrir dos jornadas de conciertos en un Nuevo Mirandilla casi colgando el 'no hay billetes' y con un público muy entregado que hizo al artista vibrar de forma especial.
El éxito de Alejandro Sanz en Cádiz se traduce en los más de cinco minutos de ovación que su gente le dedicó al final de las actuaciones de este sábado, aderezada con una pequeña fiesta flamenca con la Niña Pastori sobre el escenario.
"Tenemos que irnos pero no queremos irnos", reconocía un Alejandro Sanz que posteriormente publicaba en Twitter: "Y ahora, ¿qué carajo hago yo con todo esto que siento?".
Así fue el final y así se vivió en el estadio gaditano:
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