En un acto de vandalismo que ha sorprendido y disgustado a muchos, la cartelería electoral de los candidatos a la alcaldía de Cádiz ha sido objeto de ataques en varios puntos de la ciudad. Las denuncias, según las consultas realizadas por este medio, indican que las agresiones provienen de una asociación feminista pro-abolicionista y antitrans, que niega reconocer los derechos de las personas LGTBIQ+ y trans.
El método de ataque ha sido a través de pegatinas, que se han adherido a los carteles electorales con diversos mensajes ideológicos de odio y discriminación. Estos actos han generado consternación y han sido condenados por diversas entidades y ciudadanos, quienes abogan por un proceso electoral libre de odio y prejuicio.
La identidad de la asociación detrás de estos ataques aún no ha sido confirmada, pero las entidades consultadas lo tienen claro, aunque no se han querido pronunciar. Los actos de vandalismo en el contexto electoral no solo son condenables, sino que también pueden ser considerados delitos electorales y de odio, que pueden acarrear consecuencias legales para los perpetradores.
La comunidad LGTBIQ+ y trans de Cádiz, así como sus aliados y defensores, han reafirmado su compromiso con la lucha por la igualdad y el respeto a los derechos humanos en medio de este incidente. Han instado a la comunidad en general a condenar estos actos y a no permitir que el odio y la discriminación contaminen el proceso electoral.
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