La Diputación de Cádiz y el Ayuntamiento de San José del Valle han suscrito un convenio de colaboración para financiar una exploración geofísica en la antigua Ermita del Mimbral, con el objetivo de identificar indicios de posibles fosas comunes que contengan restos de personas represaliadas tras la sublevación militar de julio de 1936. Este acuerdo, firmado por la presidenta de Diputación, Almudena Martínez, y el alcalde de San José del Valle, Antonio González Carretero, establece una subvención de 2.466 euros por parte de la Diputación para cubrir los costos de la investigación.
Con la financiación obtenida, el municipio podrá contratar los servicios de georradar y personal técnico especializado adscrito a la Unidad de Geodetección del Patrimonio Histórico-Arqueológico de la Universidad de Cádiz. Esta ayuda responde a una solicitud presentada por el Ayuntamiento de San José del Valle y es gestionada a través del Servicio de Memoria Histórica y Democrática de Diputación, dirigido por el vicepresidente segundo Javier Vidal.
El proyecto se centra en dos enclaves del municipio que, según el actual mapa de fosas, podrían albergar enterramientos colectivos de personas represaliadas durante el conflicto: el cementerio viejo y la antigua Ermita del Mimbral. En el cementerio, ya se ha iniciado otra investigación financiada por el Ministerio de la Presidencia y Memoria Democrática, en el marco del primer Plan de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía.
La represión en San José del Valle y sus alrededores ha sido objeto de estudio en obras como la de los investigadores Manuel Moreno Bermejo y Santiago Moreno Tello. Este último publicó 'San José del Valle. Apuntes a su estudio durante la II República, golpe de Estado y represión franquista', un trabajo financiado por el Servicio de Memoria Histórica y Democrática de la Diputación, que recoge testimonios sobre los asesinatos de vecinos de El Valle, Arcos, Algar y Tempul (Jerez) y su entierro en las proximidades de la Ermita del Mimbral. Algunos nombres se destacan en la tradición oral, como Juan Durán Orellana, propietario de la extinta Venta El Alacrán, y Alfonso Arroyal, el último alcalde republicano de Arcos, quien según algunas fuentes podría estar enterrado en la zona.
La solicitud original del Ayuntamiento para esta investigación menciona que el sacerdote de la Ermita medió con los represores de la época para que las personas ejecutadas fueran enterradas en el cementerio de la Ermita del Mimbral, cuyos registros fueron llevados por el propio cura sin que se señalizara mediante lápidas.
La exploración abarcará 750 metros cuadrados en la Ermita del Mimbral, un lugar ahora accesible debido a la sequía actual, que ha reducido el volumen de agua en el embalse Guadalcacín II, permitiendo que las ruinas queden visibles. Durante los trabajos de ampliación del embalse en los años 90, se exhumaron las tumbas oficiales del cementerio de la Ermita, sin considerar las posibles fosas comunes. La sequía brinda una oportunidad única para esta exploración; en caso de detectar anomalías compatibles con un enterramiento colectivo, se contemplará una segunda fase de sondeo para verificar los hallazgos.
La Asociación de Memoria Histórica de San José del Valle, recientemente constituida, ha insistido en la necesidad de realizar esta búsqueda, destacando que aún hay familiares de las víctimas que, casi 90 años después, esperan conocer el paradero de sus seres queridos.