Se ha llevado a cabo en la Base Naval de Rota un ejercicio de simulación de un vertido accidental de hidrocarburos, un evento que forma parte de las actividades anuales diseñadas para fortalecer la coordinación y respuesta ante posibles emergencias de contaminación marina. Este simulacro es una iniciativa programada dentro del marco de actividades conjuntas entre la U.S. Navy y la Armada, y como en años anteriores, ha contado con la colaboración de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, la Capitanía Marítima de Cádiz y Salvamento Marítimo, conforme a lo establecido en el Sistema Nacional de Respuesta ante la contaminación marina.
La simulación comenzó con una pérdida controlada de gasóleo tipo Diesel Fuel Marine (DFM) durante un procedimiento de aprovisionamiento a un buque, siendo inicialmente contenida por los protocolos de respuesta inmediata de la U.S. Navy y la Armada. Este procedimiento representa el nivel I de respuesta en situaciones de vertido. Sin embargo, el escenario se complicó evolucionando hacia un vertido incontrolado, lo que llevó a la activación del Plan Interior Marítimo de la Base y el nivel II de respuesta. Para gestionar esta escalada, se estableció una coordinación con la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz y se desplegaron recursos de Salvamento Marítimo, con el objetivo de prevenir una extensión masiva del derrame por las aguas de la bahía.
Además, un equipo de observadores de la Unidad Militar de Emergencias participó en el ejercicio, evaluando la eficacia de las operaciones y la integración de los distintos cuerpos y entidades involucradas en la respuesta a este tipo de incidentes. La realización de este simulacro subraya el compromiso continuo de las fuerzas armadas y las entidades civiles en la preparación y capacidad de respuesta ante potenciales situaciones de riesgo ambiental en el mar.
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