La Agencia Espacial Europea (ESA) ha puesto en marcha, a través de su oficina de recursos educativos española ESERO situada en el Parque de las Ciencias de Granada, la competición 'CanSat'. Esta iniciativa cuenta con la colaboración del gobierno autonómico de Andalucía y desafía a estudiantes de toda Europa a construir y lanzar un minisatélite del tamaño de una lata de refresco. La competición se caracteriza por el reto de adaptar los subsistemas principales de un satélite real, como la energía, los sensores y un sistema de comunicación, dentro de un volumen muy reducido.
El equipo 'El Sur del Espacio' del IES Vicente Aleixandre de Barbate participará en el concurso CanSat de la comunidad andaluza, con el apoyo del restaurante El Campero. Este desafío no solo pone a prueba las capacidades técnicas de los estudiantes, sino también su habilidad para trabajar en equipo y comunicar eficazmente su proyecto. Los estudiantes, que cursan 4º de E.S.O. y tienen entre 15 y 17 años, están dirigidos por su profesor de Tecnología.
Durante el lanzamiento del CanSat, el satélite es introducido en un cohete que alcanza aproximadamente un kilómetro de altura. A medida que el satélite desciende asistido por un paracaídas, los estudiantes llevan a cabo un experimento científico, aplicando así de manera práctica sus conocimientos de física y programación.
La fase regional de esta competición se celebrará el próximo día 7 de mayo en Alcalá de Guadaíra, Sevilla. El equipo ganador en esta fase representará a la comunidad andaluza en la fase nacional. Como reconocimiento, el equipo finalista de cada país miembro será invitado por la Agencia Espacial Europea a su centro ESTEC en Noordwijk, donde podrán participar del encuentro internacional 'Ingeniero por un día', interactuando con expertos espaciales y explorando instalaciones y laboratorios.
El profesorado del IES Vicente Aleixandre valora muy positivamente esta oportunidad, ya que fomenta el aprendizaje práctico del alumnado y refuerza habilidades esenciales como la investigación científica y la tecnología. Además, contribuye a motivar a los estudiantes en el estudio de disciplinas STEM, en un momento en que se observa una tendencia a la baja en jóvenes que eligen carreras relacionadas con estas áreas en Europa. La ESA, a través de sus oficinas ESERO, se esfuerza por revertir esta tendencia y aumentar la alfabetización científica y tecnológica entre los escolares europeos, preparándolos para los desafíos del futuro.
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