El Ayuntamiento de El Puerto de Santa María ha recibido numerosas quejas sobre la presencia de gorrillas en distintos lugares y bolsas de aparcamiento público de la ciudad, así como sobre los malos modos de algunos de estos individuos. Ante esta situación, la Policía Local de El Puerto solicita la colaboración de todos los portuenses para denunciar cualquier actitud impropia por parte de estos "falsos aparcacoches", con el fin de poder actuar contra ellos.
Se trata de un negocio que elude la Ley, ya que pedir dinero en la calle no es delito, pero utilizar la coacción para conseguirlo sí lo es. Por tanto, la única manera de combatir estas actuaciones ilícitas es mediante la colaboración ciudadana. La Policía Local destaca que solo con la ayuda de los vecinos se podrá "cortar de raíz estas actuaciones ilícitas que deterioran la imagen de la ciudad".
Lamentablemente, la Ley del Derecho a la Libre Circulación impide que se pueda expulsar a estos individuos de los aparcamientos. Aunque los agentes realizan rondas constantes por las distintas zonas para disuadir a los gorrillas, el único modo de multarlos es a través de una denuncia previa. Por ello, se insta a que cualquier ciudadano que sea testigo o víctima de una amenaza o extorsión denuncie en la Comisaría o llame al 092.
Las sanciones interpuestas por estos hechos en lo que va de año ascienden a 125, lo que demuestra que sí se están tomando medidas. David Viñuela, intendente principal de la Jefatura de la Policía Local de El Puerto de Santa María, subraya que "si los ciudadanos quieren una respuesta, tienen que colaborar".
Sin embargo, son muy pocas las veces que las personas deciden denunciar una extorsión por parte de estos individuos, optando en su lugar por dar una pequeña cantidad de dinero al gorrilla. En estos casos, la Policía no puede actuar contra el aparcacoches, ya que teóricamente el ciudadano le entrega unas monedas de buena fe y sin que medien amenazas directas, por mucho que se piense que si no se entrega el dinero el coche podría ser dañado.
Desde la Policía Local aseguran que "seguiremos dando la batalla", pues entienden que "es una práctica que hay que erradicar en El Puerto" ya que causa muchos trastornos, provoca intranquilidad a los conductores y además crea una mala imagen de la ciudad. Sin embargo, sin la ayuda de los ciudadanos, los gorrillas seguirán gozando de impunidad.
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