El Ayuntamiento de Medina Sidonia ha confirmado que el municipio mantiene el nivel de alerta frente al virus del Nilo, respondiendo así a las preocupaciones expresadas por propietarios de ganaderías caballares y la ciudadanía en general. Según ha informado el equipo de gobierno, desde el pasado 1 de junio se llevan a cabo tratamientos quincenales en fuentes y arroyos, incluyendo medidas preventivas como el vaciado de los pilares de la Fuente del Azocarrem, debido a que la proliferación de mosquitos transmisores del virus ocurre principalmente en aguas estancadas.
En un comunicado reciente, el Ayuntamiento ha subrayado que "estos tratamientos están intensificándose", especialmente tras la reunión mantenida con la Delegación Territorial de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía. No obstante, se ha señalado que Medina Sidonia mantiene un nivel de riesgo inferior al de otros municipios cercanos como Benalup-Casas Viejas, Vejer y Barbate, en la comarca de La Janda.
El Ayuntamiento también ha enfatizado que "en ningún momento se ha dejado de vigilar y tomar cuantas medidas sean precisas", manteniendo un contacto permanente con los propietarios de ganaderías, especialmente aquellos relacionados con caballos y yeguadas. Sin embargo, han aclarado que esto "no significa que no exista riesgo", recordando las recomendaciones del bando municipal del 10 de junio, en el que se pedía a los vecinos evitar la acumulación de agua en recipientes y, si fuera inevitable, vaciarlos al menos una vez a la semana.
Complementariamente, se ha aconsejado que en caso de no poder vaciar o proteger fuentes de agua como estanques, piscinas o fuentes ornamentales, se utilicen métodos de cloración o la introducción de peces que consuman las larvas de los mosquitos.
Finalmente, el Ayuntamiento ha solicitado la colaboración de todos los vecinos para maximizar la efectividad de los tratamientos, instando a seguir las recomendaciones preventivas emitidas.
La campaña de control de mosquitos portadores del virus del Nilo, que se inició el 1 de junio, forma parte de un programa más amplio impulsado por la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía. Este programa incluye la vigilancia de 125 municipios andaluces, entre los cuales se encuentran más de veinte localidades de la provincia de Cádiz, cuatro de ellas en nivel 4, el segundo más alto de riesgo. Dentro de estas áreas, se han identificado dos comarcas de especial seguimiento, siendo una de ellas la que incluye a Medina Sidonia junto a Tarifa, Barbate, Vejer de la Frontera y Benalup-Casas Viejas.
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