La Junta de Andalucía ha llevado a cabo la liberación de 19 pollos de cercetas pardillas en las marismas de Trebujena, como parte de los esfuerzos para reforzar la población silvestre de esta especie en peligro de extinción. Esta especie, considerada el pato más amenazado de Europa, enfrenta un riesgo crítico en España, donde sus números se han reducido drásticamente debido a la pérdida de hábitats.
El delegado territorial de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Óscar Curtido, ha participado en esta suelta. Tras la liberación, Curtido subrayó “el compromiso del Gobierno andaluz, a través de la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente, con la preservación de las especies en peligro de extinción y con la recuperación y conservación de aves de humedales”. Además, Curtido destacó “la importancia de las marismas de Trebujena en la conservación de esta especie” y reconoció la labor del equipo técnico de la Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía, el Zoobotánico de Jerez y los voluntarios de la Sociedad Gaditana de Historia Natural, quienes contribuyeron en la cría de los pollos, así como de los titulares de los terrenos donde se llevó a cabo la liberación.
Las cercetas pardillas liberadas provienen de huevos rescatados la pasada primavera en el humedal de la Dehesa de Abajo, en la provincia de Sevilla, que fueron cuidados hasta su liberación por el Zoobotánico de Jerez. Para facilitar su adaptación, los ejemplares pasan un periodo en jaulones de aclimatación, donde permanecen unos días con alimento antes de ser liberados por completo. Todos los individuos están identificados con anillas, y algunos llevan dispositivos de seguimiento remoto mediante satélite, lo que permitirá a la Junta de Andalucía monitorizar sus movimientos y el uso de los humedales.
Esta liberación se enmarca en el Plan de Recuperación y Conservación de las Aves Humedales y en el Proyecto LIFE Cerceta Pardilla, que tiene como objetivo mejorar el estado de conservación de 3.000 hectáreas de humedales y revertir el riesgo de extinción de esta especie. El proyecto, coordinado por la Fundación Biodiversidad, cuenta con la colaboración de la Generalitat Valenciana, el Gobierno de la Región de Murcia, SEO/BirdLife y la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE).
La cerceta pardilla es un pato pequeño, de plumaje moteado, con una característica zona oscura alrededor del ojo y una cresta en la nuca. Su población, que hasta mediados del siglo veinte era abundante en los humedales costeros mediterráneos, especialmente en Doñana, se ha reducido a solo 74 parejas en 2020, concentrándose casi exclusivamente en zonas húmedas de Andalucía, Murcia y Valencia.
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