El Área de Gestión Sanitaria de Jerez, Costa Noroeste y Sierra, junto con el Distrito de Atención Primaria Bahía de Cádiz-La Janda, ha activado los Planes de Prevención y Atención a las Agresiones del Servicio Andaluz de Salud (SAS) tras dos incidentes violentos registrados en los centros de salud de Sanlúcar Barrio Alto y Conil de la Frontera el jueves 18 de noviembre de 2024.
En el Centro de Salud de Sanlúcar Barrio Alto, un usuario en estado alterado intentó acceder violentamente a la consulta de un enfermero mientras atendía a otro paciente. Más tarde, este mismo individuo alertó de que había un paciente en el suelo; al salir el profesional para asistirlo, fue agredido con una patada en la pierna izquierda. El Área Sanitaria de Jerez ha proporcionado recursos de apoyo psicológico, asesoramiento jurídico y asistencia al trabajador afectado. Asimismo, dos concentraciones, una en el propio centro y otra en el Hospital Universitario de Jerez, se llevaron a cabo para condenar los hechos. En estos actos, se leyó un manifiesto de rechazo, mientras el profesional presentó una denuncia formal.
En el caso de Conil de la Frontera, otro individuo ingresó al centro de salud con una barra de hierro e intentó agredir a seis profesionales. El agresor causó daños materiales en la zona de admisión y en la Unidad de Atención al Ciudadano. La Guardia Civil intervino y detuvo al responsable. Para expresar la repulsa ante este ataque, se realizará una concentración el viernes 22 de noviembre a las 11:00 horas frente al centro sanitario.
La Delegación Territorial de Salud y Consumo, liderada por Eva Pajares, ha condenado estos incidentes, mostrando apoyo a los trabajadores afectados y recordando que este tipo de agresiones conlleva consecuencias legales, como se evidenció en una reciente sentencia que impuso una orden de alejamiento a un paciente por amenazar a una médica en Jerez. Pajares destacó que el Plan de Prevención y Atención a las Agresiones del SAS contempla medidas como atención psicológica inmediata, refuerzo de la seguridad en los centros, canales rápidos de denuncia y la figura del ‘profesional guía’, destinada a acompañar a los afectados.
Además, la Comisión Provincial contra las Agresiones a Profesionales Sanitarios, presidida por la delegada territorial de Salud, busca identificar áreas de mejora para reducir estos episodios. Este órgano incluye a representantes del SAS, interlocutores sanitarios de la Policía Nacional y la Guardia Civil, asesoría jurídica, y referentes de los hospitales y centros de emergencias sanitarias de la provincia. También se refuerzan las condiciones de seguridad en los lugares de trabajo.
El Servicio Andaluz de Salud reafirma su compromiso con la protección de sus trabajadores y su condena ante cualquier acto de violencia contra ellos.
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