La Junta de Andalucía ha mantenido la declaración de escasez severa de agua en el Sistema Guadalete, perteneciente a la Demarcación Hidrográfica del Guadalete-Barbate, que incluye al municipio de Chiclana. Este estado, que no ha variado desde febrero de 2024, implica restricciones en el suministro de agua con una reducción del 10 por ciento en el caudal destinado al municipio.
Aunque las precipitaciones registradas durante la Semana Santa y en el pasado mes de octubre han aliviado parcialmente la situación hídrica en la provincia de Cádiz, la mejora no ha sido suficiente para modificar el nivel de alerta en la mayoría de las unidades territoriales de la demarcación. La unidad territorial de la Sierra de Cádiz ha pasado de un estado de escasez severa a normalidad, y la unidad de Tarifa ha mejorado de escasez severa a moderada. Sin embargo, la unidad territorial Guadalete, a la que pertenece Chiclana, mantiene el mismo nivel de alerta que al inicio del año.
José María Román, alcalde de Chiclana, señaló que, aunque la situación ha mejorado en comparación con finales de 2023, cuando se sufrían reducciones significativas en la presión del suministro durante gran parte del día, la preocupación persiste. "Aunque las lluvias de la Semana Santa y del mes de octubre aliviaron en parte la situación en la provincia de Cádiz, lo cierto es que la Junta de Andalucía mantiene la situación de escasez severa en el Sistema Guadalete y, por tanto, las restricciones del caudal del agua en un 10 por ciento para Chiclana", indicó.
El alcalde destacó que, pese a que el embalse de Los Hurones registra un nivel del 74 por ciento de su capacidad, las restricciones seguirán vigentes al menos hasta enero de 2025. Además, expresó su esperanza en que las lluvias de invierno y primavera puedan mejorar la situación hídrica general en la zona.
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