La Comisión Local de Patrimonio Histórico de Jerez de la Frontera ha celebrado su última sesión del año, en la que se han aprobado diversas iniciativas destinadas a la mejora del centro histórico. Entre los proyectos aprobados, destaca la rehabilitación de un edificio situado en la calle Santa María, en el entorno de la Plaza Esteve y el Gallo Azul, para su transformación en ocho viviendas. El inmueble, que actualmente alberga tres viviendas, está catalogado como de Interés Genérico, lo que resalta su valor arquitectónico y su importancia dentro del tejido urbano del centro comercial de la ciudad.
El delegado de Presidencia y Centro Histórico, Agustín Muñoz, quien presidió la sesión junto a la delegada de Urbanismo, Belén de la Cuadra, explicó que el proyecto prevé una redistribución interior para habilitar cuatro apartamentos por planta, además de la colocación de nuevos revestimientos y la instalación de los servicios necesarios para uso residencial. Según Muñoz, esta intervención contribuirá no solo a incrementar el parque residencial del centro, sino también a fomentar la actividad económica y mejorar la imagen del entorno, ofreciendo un aspecto más renovado a los edificios de la zona.
En el mismo encuentro, se aprobó la rehabilitación de un edificio catalogado situado en la calle Bizcocheros, que inicialmente se proyectó para apartamentos turísticos, pero que ahora será adaptado como vivienda unifamiliar. Este cambio de uso responde a las necesidades de la solicitud presentada y mantiene el enfoque en la conservación del patrimonio arquitectónico de la ciudad.
Otra de las actuaciones autorizadas fue el resanado y pintado de la fachada del Convento de las Hermanas de la Cruz, uno de los referentes históricos y culturales de Jerez. Asimismo, se dio luz verde a los trabajos de conservación y mantenimiento en una nave bodeguera catalogada, ubicada en la calle Muro, donde se contempla la reparación de las cubiertas de tejas y el resanado y pintado de paredes interiores. Estas obras, además de garantizar la preservación de los elementos patrimoniales, buscan mantener el buen estado de inmuebles emblemáticos del centro histórico.
Por otro lado, la delegada de Vivienda, Belén de la Cuadra, mantuvo una reunión con el Agente Rehabilitador Acciona, designado por los vecinos de Santo Tomás de Aquino Norte para gestionar la tramitación y ejecución de las obras de rehabilitación de los bloques residenciales en esta barriada histórica. Este proyecto, que forma parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (ERRP) financiado por la Unión Europea a través de los fondos NextGenerationEU, tiene como objetivo mejorar las condiciones de habitabilidad en una zona que lleva años esperando estas intervenciones.
Durante la reunión, celebrada en la Oficina de Rehabilitación, De la Cuadra expresó su agradecimiento a Acciona por la gestión ágil y eficaz del proyecto, al tiempo que reiteró el compromiso del Ayuntamiento de Jerez de la Frontera de proporcionar el apoyo necesario para garantizar que las obras sean una realidad en el menor plazo posible. Según la delegada, esta iniciativa se enmarca en el compromiso de la alcaldesa, María José García-Pelayo, de trabajar en la regeneración de las barriadas históricas de la ciudad, mejorando tanto la calidad de vida de sus residentes como la integración urbana de estas zonas.
Los trabajos en Santo Tomás de Aquino representan un esfuerzo conjunto entre los vecinos, el Ayuntamiento y las entidades encargadas de la ejecución, consolidando un modelo de cooperación para la mejora de espacios residenciales históricos. El proyecto no solo busca renovar la infraestructura, sino también revalorizar el entorno urbano, alineándose con las estrategias de recuperación sostenible impulsadas a nivel europeo.
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