La Policía Local de Jerez ha informado de que a principios de esta semana tuvieron que intervenir junto a Bomberos en una nave abandonada, tras ser avisados del fuerte olor que se desprendía de su interior.
Se comprobó que existía un corte eléctrico, dejando de funcionar las cámaras frigoríficas en las que se almacenaban unos 10.000 kilos de pescados y mariscos.
Al haberse roto la cadena de frío, la mercancía con el paso del tiempo entró en proceso de descomposición, provocando un problema de salubridad que requirió de una actuación inmediata para evitar mayores riesgos.
El Cuerpo de Bomberos fue el encargado de sacar toda la mercancía de la nave, en la que por el avanzado estado de descomposición de las mercancías se había concentrado una gran cantidad de gases, motivo por el cual y para evitar la peligrosa inhalación de los mismos, hubieron de hacer uso de equipos autónomos de respiración
Tamibién se encargaron de la posterior desinfección de la nave en cuestión con productos químicos facilitados por la Empresa Municipal de Limpieza, que fue la encargada finalmente de trasladar todos los restos sacados.
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