Este miércoles 30 de agosto, el Ayuntamiento de San Roque ha emitido un llamamiento a la tranquilidad a los ciudadanos en relación con la posibilidad de que el agua potable presente una coloración anómala. La causa de este fenómeno radica en la sequía que afecta a la zona, obligando a la captación de agua de las partes más bajas de los embalses de Charco Redondo y Guadarranque, donde las concentraciones de hierro y manganeso son superiores a lo habitual.
La empresa mancomunada ARCGISA, encargada del suministro de agua en alta, ha explicado en un comunicado que la falta de lluvias ha disminuido los niveles de los embalses, requiriendo que el agua sea extraída desde las tomas inferiores de ambos pantanos. Esto resulta en niveles de hierro y manganeso más altos, lo que a su vez provoca la alteración en la coloración del agua.
Según ARCGISA, aunque el color pueda generar alarma, la calidad del agua se encuentra dentro de los límites legales establecidos por la normativa sanitaria para su consumo y uso, y por lo tanto, no representa un riesgo para la salud.
En este sentido, la empresa ha querido dejar claro que se están llevando a cabo labores para mitigar en lo posible las concentraciones de estos elementos químicos en el agua suministrada.
Envíanos tus vídeos, fotos, denuncias y noticias por WhatsApp (645 33 11 00)
