Tras quedar paralizada en 2014 por falta de recursos económicos, la construcción de la iglesia de La Zarzuela en Tarifa se ha convertido en una reclamación vecinal persistente. Un técnico del Obispado de Cádiz, el arquitecto Antonio Sánchez Casas, se ha reunido hoy con autoridades municipales, entre ellos el técnico municipal Carlos Rodríguez, el delegado vecinal de la Zarzuela, José Serrano, y el alcalde de Tarifa, José Antonio Santos, para abordar el futuro del proyecto.
Los presentes en la reunión han llegado al consenso de que la estructura actual del templo, a pesar del deterioro debido a la falta de mantenimiento, es recuperable. Se ha determinado que la prioridad es "cubrir aguas", es decir, finalizar las cubiertas del edificio. Actuaciones posteriores se centrarían en la cimentación y el revestimiento interior del templo.
Aunque el compromiso municipal para encontrar financiación existe, las autoridades reconocen que los recursos propios son insuficientes para un proyecto de tal magnitud. El alcalde de Tarifa, José A. Santos, ha afirmado que son conscientes de la importancia que este proyecto tendría para la población local, pero reitera que se trata de un esfuerzo compartido entre las instituciones municipales y el Obispado de Cádiz.
El delegado vecinal de la Zarzuela, José Serrano, ha señalado que no se descarta la organización de eventos para recaudar fondos para la continuación de la obra, que se vislumbra como un centro religioso comunitario para la celebración de cultos y de encuentros tradicionales.
Así, aunque persisten obstáculos económicos, las partes implicadas muestran voluntad para llevar adelante este proyecto que, una vez finalizado, podría convertirse en un punto neurálgico para la comunidad de La Zarzuela y áreas circundantes.
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