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En una acción preventiva sin precedentes, agentes de la Policía Nacional han llevado a cabo un amplio programa de formación dirigido a los responsables educativos del Área Educativa de Jerez. El objetivo es claro: prevenir el consumo de nuevas drogas sintéticas y marihuana transgénica entre jóvenes y adolescentes. Esta iniciativa ha contado con el respaldo de la Subdelegación del Gobierno en Cádiz y de la Inspección de Educación de la Junta de Andalucía.

La formación, impartida los días 7 y 12 de septiembre, se centró en cómo detectar tempranamente el consumo de estas sustancias y en esclarecer las severas consecuencias que estas drogas pueden tener, tanto a nivel físico como psicológico. A los encuentros asistieron directores, jefes de estudio, orientadores y tutores de distintas etapas educativas.

Marihuana transgénica: un problema en aumento

La realidad sobre la marihuana transgénica fue uno de los temas más discutidos durante las jornadas. Actualmente, el 99% de las plantas de marihuana provienen de semillas modificadas genéticamente para producir un alto contenido de THC, el componente psicoactivo de la planta. A pesar de esta alarmante situación, existe una creencia errónea en la sociedad de que el consumo de marihuana y hachís es inofensivo. Los expertos vinculan el aumento de enfermedades mentales en jóvenes con el consumo indiscriminado de estos productos, que ya han perdido su carácter natural.

Formar a formadores: un enfoque estratégico

La estrategia de "formar a formadores" busca que sean los propios docentes quienes transmitan esta información a sus alumnos durante el próximo curso escolar. El programa no solo se detiene en la prevención, sino que también ofrece pautas para la detección temprana y el tratamiento adecuado si fuese necesario. De esta forma, se espera combatir uno de los vectores más críticos de fracaso educativo y laboral en la sociedad actual.

Una lucha conjunta

Este esfuerzo conjunto entre la Policía Nacional y las instituciones educativas se extenderá en los próximos meses al alumnado y a sus familias a través de las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPAS). La iniciativa busca no solo informar, sino también fomentar una conciencia colectiva sobre los riesgos asociados al consumo de drogas.

Futuros retos y agradecimiento institucional

Las autoridades recalcan que la lucha contra el consumo de drogas es una tarea que involucra a toda la sociedad. Por ello, el compromiso de instituciones como la Policía Nacional y la Consejería de Educación es crucial para abordar de manera eficiente este problema social que pone en riesgo la salud y el futuro de los más jóvenes. Se espera que esta formación sirva como un punto de partida para futuras acciones de prevención y concienciación en la provincia.

 


 

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