En un esfuerzo coordinado para luchar contra el acoso escolar, la alcaldesa Carmen Álvarez presentará el próximo lunes ante el Pleno del Ayuntamiento una declaración institucional propuesta por la asociación ABSA (Asociación Antibullying de Sanlúcar). El objetivo es declarar a Sanlúcar como Ciudad Antibullying, un proyecto al que se han sumado todos los grupos políticos de la Corporación local.
La declaración resalta la vulnerabilidad de la infancia y la adolescencia ante el acoso escolar, mencionando que uno de cada cuatro alumnos podría ser víctima de este tipo de violencia. Este fenómeno no es ajeno a Sanlúcar; la asociación ABSA ha registrado más de un centenar de consultas en sus dos años de existencia, muchas de las cuales se ajustan al perfil de acoso escolar.
El documento expone la problemática actual que supone la "cultura de la violencia" en la sociedad, que afecta negativamente el bienestar presente y futuro de los menores. Consecuencias como la baja autoestima, la depresión, la ansiedad y hasta pensamientos suicidas son, según el texto, algunas de las terribles secuelas que el acoso escolar puede causar.
La declaración también advierte de las implicaciones a largo plazo, señalando que gran parte de los acosadores de hoy podrían convertirse en futuros delincuentes o maltratadores. Con la declaración de Ciudad Antibullying, se busca que los residentes de Sanlúcar, y en especial las familias y menores afectados, reconozcan la gravedad de estas conductas y se alineen con los valores de empatía y respeto que promueve el municipio.
Según palabras de Carmen Álvarez, la masiva respuesta de la población de Sanlúcar ante este movimiento demuestra el "carácter solidario de nuestra ciudadanía contra esta injusticia social". Con esta declaración, Sanlúcar pretende marcar un hito en la lucha contra el acoso escolar, generando conciencia y promoviendo acciones que erradiquen esta forma de violencia.
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