La Junta de Andalucía va a impulsar un plan de inspección adicional para mejorar la sostenibilidad del marisqueo a pie en la provincia de Cádiz. La iniciativa se enmarca en la búsqueda de soluciones para el furtivismo en el sector.
Carmen Crespo, consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, durante su intervención en el Parlamento, hizo hincapié en la importancia de controlar y reducir el furtivismo en el marisqueo. Crespo informó que se están celebrando numerosas reuniones entre la Junta y representantes del sector con el fin de "reforzar al máximo las inspecciones”.
La consejera criticó la inacción de anteriores gobiernos respecto al problema de la coquina y destacó la predisposición del actual Ejecutivo para trabajar con los mariscadores y ofrecerles nuevas oportunidades. Crespo subrayó el “absoluto respeto” que siente hacia estos profesionales y la constante colaboración entre la Consejería y el sector marisquero para resolver “problemas que se vienen arrastrando desde hace muchísimos años”.
En otro segmento de su intervención, Crespo recordó las ventajas del I Plan de Gestión de la Coquina impulsado por el Gobierno de Juanma Moreno. Gracias a este plan, los mariscadores a pie en Andalucía tienen acceso a ayudas de fondos europeos que compensan pérdidas durante los períodos de veda. Crespo señaló: “Durante años, no se hizo un plan de gestión de la coquina y, por tanto, los mariscadores no tenían derecho a paradas temporales remuneradas”, considerando que el cambio es “un paso de gigante”.
Crespo resaltó las acciones recientes de la Junta, indicando que se ha aumentado el número de licencias para marisqueo a pie en busca de coquinas. Además, a petición de los mariscadores, se ha aprobado el cierre del caladero el pasado 2 de octubre, en respuesta a los problemas generados por el aumento de la temperatura del mar. Esta variación térmica provoca que las coquinas se entierren más y se alejen de la orilla.
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