La Unidad de Protección del Medio Ambiente (Uproma) de la Policía Local de Sanlúcar ha intensificado su labor contra la caza ilegal de aves fringílidas e insectívoras. En su última semana de acciones, enmarcadas en la operación Anthus pratensis, han sido incautadas seis redes abatibles, cinco reclamos electrónicos, 124 trampas y un teléfono móvil de reclamo.
Tres individuos han sido identificados por los agentes medioambientales mientras se encontraban participando en estas actividades prohibidas. En el transcurso de la operación, que aún se encuentra activa, los agentes hallaron seis ejemplares muertos de Bisbita, una especie frecuentemente afectada por estas capturas ilícitas. Sin embargo, también lograron recuperar en vida nueve jilgueros, seis verderones, tres luganos y dos pardillos. Estas aves, que habían sido enjauladas por los cazadores, fueron liberadas por los miembros de la Uproma.
La operación ha contado con la colaboración del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y la Policía Local de Chipiona, expandiendo así el ámbito de acción. Las intervenciones en Sanlúcar se han focalizado en áreas periféricas como Bonanza, La Algaida o La Jara.
Desde la Uproma-092 se hace un "agradecimiento público a la colaboración ciudadana" en las acciones realizadas hasta el momento. También recuerdan a la población que, ante la presencia de prácticas de caza furtiva, pueden contactar a esta patrulla medioambiental, la Policía Local de Sanlúcar o la Policía Local de Chipiona, dependiendo del área en la que se encuentren los infractores.
Finalmente, es importante destacar que, según la Ley 8/2003 de Flora y Fauna Silvestre de Andalucía, la caza ilegal de aves puede resultar en sanciones económicas que llegan hasta los 300.000 euros.
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