La Avenida de San Enrique en San Roque está experimentando una transformación significativa. La Delegación de Obras y Servicios del Ayuntamiento está implementando una serie de mejoras, centradas en la reposición de acerados y la eliminación de barreras arquitectónicas. Este proyecto tiene como finalidad facilitar la movilidad peatonal a lo largo de toda la vía, un eje esencial de la barriada.
En una reciente inspección, la teniente de alcalde de Obras y Servicios, Belén Jiménez, junto con Eva Gil, concejal responsable del Valle del Guadiaro, supervisaron los avances de los trabajos. Jiménez destacó la importancia de esta intervención, mencionando que "estamos haciendo una segunda actuación integral en San Enrique, centrada sobre todo en esta carretera que cruza toda la barriada y que tiene mucho tránsito”.
La intervención se centra en la eliminación de barreras arquitectónicas para mejorar la accesibilidad en ambas aceras. Además, se planea la adecuación de zonas ajardinadas donde actualmente no hay acerado, buscando garantizar un tránsito fluido y seguro para todos los vecinos y vecinas.
Jiménez también señaló un aspecto pendiente desde la eliminación de soterrados frente a la Cañada Real. "Se está haciendo ya esta obra y luego se reestructurará lo concerniente a los contenedores”, agregó. Estas mejoras, aunque representan una inversión económica considerable, son vistas como esenciales por el Equipo de Gobierno para mejorar la calidad de vida en la barriada y en el municipio.
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