Los grafitis en los trenes de Renfe en Andalucía han generado un precio de 556.870 euros durante el último año, una situación que ha afectado particularmente a la provincia de Cádiz, donde se han registrado 11 de las 76 intrusiones denunciadas en toda la comunidad. Este problema no solo implica un desembolso económico directo en limpieza y medidas de seguridad, sino que repercute negativamente en la experiencia de los usuarios, quienes enfrentan retrasos, supresión de servicios y molestias por el olor de los productos químicos utilizados en los grafitis.
Cádiz se ha visto especialmente impactada dentro del contexto andaluz, formando parte de un problema mayor que a nivel nacional alcanza un precio de 25 millones de euros, según datos de Renfe. La situación en Andalucía refleja un gasto significativo, que representa un 2,2% del total nacional, evidenciando la magnitud del reto que supone el vandalismo grafitero para la operadora ferroviaria y la sociedad.
Además de Cádiz, otras provincias andaluzas como Sevilla (33 casos), Málaga (15 casos), Huelva (8 casos), Córdoba (4 casos), Almería (2 casos), Granada (2 casos) y Jaén (1 caso) también han sufrido las consecuencias de estas acciones vandálicas. En total, se han pintado 1.750 m² de superficie en trenes a lo largo de Andalucía, requiriendo más de 330 horas de trabajo en la limpieza de grafitis solamente en esta comunidad.
El año pasado, la actuación conjunta del personal de seguridad de Renfe y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado permitió identificar y poner a disposición judicial a los autores de 124 grafitis. Este esfuerzo conjunto destaca la importancia de la colaboración entre las entidades responsables y la comunidad para abordar y mitigar el impacto del vandalismo grafitero en el sistema de transporte ferroviario y en la calidad de vida de los ciudadanos.
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