El Ministerio de Cultura ha reafirmado su compromiso con la conservación y difusión del archivo histórico de la Fundación Casa Medina Sidonia, ubicado en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz. Desde 2009, el ministerio otorga ayudas anuales para este propósito, integradas en los Presupuestos Generales del Estado. Además, la Fundación ha recibido apoyo en varias ocasiones a través de ayudas en concurrencia competitiva para la descripción y digitalización de documentos.
El archivo, considerado un centro de investigación, conserva documentación desde la Edad Media, incluyendo más de 6.000 legajos que abarcan la vida cotidiana de la sociedad desde 1159. La diputada de Sumar por Cádiz, Esther Gil de Reboleño, realizó una consulta al Gobierno sobre la valoración del valor histórico y cultural de estos documentos y su digitalización. Además, preguntó si el Ejecutivo tiene previsto promover una reunión con los herederos de la duquesa Luisa Isabel Álvarez de Toledo, quienes están en un litigio por la herencia.
En su respuesta, el Ministerio de Cultura destacó que "la posición del Ministerio ante el litigio mantenido entre los hijos de la duquesa y la Fundación ha sido siempre la de observar el máximo respeto al pronunciamiento de los jueces". El Ministerio recordó que la Fundación Casa de Medina Sidonia, una entidad de carácter privado, tiene la misión de preservar, difundir y promover el patrimonio histórico y artístico que resguarda. Para cumplir estos objetivos, en 1978, Isabel Álvarez de Toledo, la XXI duquesa de Medina Sidonia, solicitó la declaración de Bien de Interés Cultural para el palacio de los Guzmanes, donde se ubica el archivo.
El Archivo General de la Fundación Casa Medina Sidonia, compuesto por 6.318 legajos, alberga la documentación generada por las administraciones nobiliarias de la Casa de Medina Sidonia y otras casas integradas. Los documentos reflejan la gestión de señoríos y estados bajo la monarquía hispánica. Desde 1962, el archivo se encuentra en el palacio de los Guzmanes, protegido bajo la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC), lo que, según el Ministerio, "no existe riesgo de dispersión".
El archivo, uno de los más relevantes de Europa, contiene documentos que datan del siglo XIII, incluyendo un privilegio rodado de 1128, otorgado por Fernando II de Castilla. Aunque la mayoría de los fondos se encuentran en Sanlúcar de Barrameda, parte de la colección se conserva en el Archivo General de Simancas.
En 1960, tras recibir el archivo de su padre, el XX duque de Medina Sidonia, Luisa Isabel Álvarez de Toledo inició la organización y catalogación de los fondos en el tercer piso del palacio de los Guzmanes, proceso que se ha mantenido desde entonces, garantizando la integridad de documentos paleográficos, diplomáticos y archivísticos de gran valor.
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